Tradicionalmente, a la muerte se la ha representado como una figura esquelética, con largos ropajes negros, armada con una enorme guadaña y un reloj de arena.
Mentiras. Todo mentiras.
Como los expertos saben y reconocen... tiene el cuerpo de un niño, pero el cerebro de un adulto.
Su nombre es: ¡Detective Conan!
Detective Conan
(名探偵 コナン)
Shinichi Kudo es un estudiante de 17 años con un don para ejercer de detective. Mientras investigaba un caso de chantaje, fue atacado por dos miembros de la organización de los hombres de negro. Estos dos asesinos, una vez redujeron a Shinichi, le obligaron a tomar APTX 4869, una droga experimental utilizada como veneno mortal que no aparecerá en ningún tipo de análisis.
El problema es que en un pequeñísimo porcentaje de ocasiones, esta droga lo que hace es encoger el cuerpo de la víctima, dejándolo aproximadamente como si tuviera siete años.
De ese momento en adelante, se hará pasar por Conan Edogawa, y acaba viviendo con su compañera Ran Mōri, y ayuda al padre de ella, Kogoro Mōri, a pasar de ser un detective fracasado, a ser uno de los mayores detectives... bueno todos sabemos de qué va la serie...
Tres tipos de episodios: no aparecen hombres de negro, aparecen hombres de negro, crece.
No aparecen hombres de negro: allá donde vaya Conan, alguien MUERE. Por algo es la muerte.
Así que resuelve el caso, y usando a algún adulto como catalizador, aclara el delito, y caso cerrado.
De vez en cuando, en vez de un asesinato es un secuestro, robo... pero no suele pasar demasiado.
Aparecen hombres de negro: igual que el otro tipo de episodio/capítulo, pero aparecen hombres de negro, con lo que el protagonista intentará averiguar más cosas sobre la organización y la droga que le suministraron. A partir de aquí, existen variaciones. A veces no pasa absolutamente nada, ya que una muerte (también conocida como Conan) interrumpe sus pesquisas con la organización.
En otros episodios, no encuentra nada. También suele pasar que muera el agente de la organización, es decir, una vez más ocurre que no encuentra nada.
Muy de vez en cuando, muy muy raramente, adquiere información muy útil, extremadamente útil, como el apodo de un miembro de la organización.
Crece: por algún extraño motivo, Conan crece y vuelve a ser Shinichi, pero al cabo de poco tiempo (normalmente, final de episodio/capítulo), vuelve a encogerse. Y aquí no ha pasado nada.
Como curiosidad, comentar que la mayoría de su fanbase, es femenino.
Con más de 60 volúmenes manga, más de 500 episodios anime y más de 12 películas, la serie de Gosho Aoyama se ha convertido en una de las más conocidas en todo el mundo, ya sea por su calidad, o por su cantidad, o por la capacidad de alargar ad æternum y ad nauseam su franquicia.
Cabe destacar su capacidad de plantillar, es decir, crear personajes con variaciones, ya sea un clon de Shinichi en moreno (Heiji Hattori), un clon de Shinichi en ladrón (Kaito Kuroba), una clon de Ran novia de clon de Shinichi en ladrón (Aoko Nakamori), y bueno, no se me ocurren más casos tan extremos.
Si somos estrictos, en realidad Shinichi es un clon del clon de Shinichi en ladrón, ya que Kaito Kuroba existía antes que Shinichi, y tenía su propia serie de Gosho Aoyama, Magic Kaito.
Bueno, una cosa no quita la otra: plantillero de nivel Toriyama.
Pfff... que se acabe ya...
2 Comments:
Así que esto es lo de Pfff que comentabas.
Me ha hecho mucha gracia. Me ha recordado a una parodia de David Ramírez en la que nadie quería acercarse a Conan porque todos los que se acercaban a él acababan muertos (por algo es la muerte XD).
Es increíble cómo una serie tan larga (y lo que le queda) cuenta tan poca cosa. El argumento prácticamente no ha avanzado nada. A pesar de todo tengo que confesar que de vez en cuando veo algún capítulo suelto y no me desagrada (siempre y cuando sea uno suelto y de vez en cuando, claro XD).
Y mira que aún me acuerdo cuando la trajo planeta cuando era peque y porque le hizo gracia a mi madre me pillé el pack ese de dos tomos (el 1 y el 7, que joputas), y me encantó.
A pesar de ser hiteable y criticable, reconozco que el autor es retorcido con los casos para ser una serie semanal con una temática donde es necesaria recaudar información, o eso o tener mucha imaginación.
El problema que le veo es que el anime lo ha matado bastante, y la serie en sí ha esdevenido en un manga de historietas a lo doraemon o shin-chan (exagerando, claro), básicamente dirigido a los críos, porque a pesar de incluir sangre, no tiene gore y contiene muchos tópicos juveniles.
Curiosamente si en vez de historietas el autor usase ese ingenio para dibujar sagas más relacionadas con los men in black sin pensar en el fandom juvenil, quizá incluso sería un thriller de esos buenos.
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